viernes, 12 de septiembre de 2008

CHUCK BERRY, TOMA EL DINERO Y CORRE

A veces me planteo si parte del encanto y la atracción por los escándalos y extravagancias de los viejos rockeros tienen o no tienen que ver más con la perspectiva histórica y romántica que les otorgan personas que relatan los hechos sin haberlos padecido. Me explico. ¡Qué peligrosos y salvajes eran Guns & Roses! Seguramente algún empleado de hotel utilizaría adjetivos más cercanos al insulto y el desprecio absoluto. ¡Qué provocadores eran los Sex Pistols! Más de uno se acercaría con este reclamo al Azkena Rock hace unos días a verlos para presenciar la leyenda. Sin duda no le pareció tan divertido que éste dijera repetidas veces "Viva España" en Euskadi hasta que le llovieron teléfonos móviles a la cabeza.

El día 26 de julio en Estepona (Málaga) tenía todas las papeletas para convertirse en uno de esos conciertos inolvidables en los que, no solo ves sobre el escenario a 2 de las leyendas más grandes que ha habido en sus respectivos estilos sino que también tienes la esperanza de que esa noche los astros se alineen para que estén en estado de gracia y nos hagan explotar de felicidad.


Pues por la parte de John Mayall genial, un conciertazo de blues a la altura de las circuntancias, con una banda sensacional y un ambiente fabuloso. La gente bailaba, cantaba y Mayall disfrutaba muchísimo. Con unas pintas algo simpáticas (salió con una camiseta interior y unos pantalones blancos que parecían recién sacados de alguna clínica) ya anunció al poco de empezar que no tuvieramos muchas esperanzas de que Chuck Berry tocara esa noche. No sabíamos si nos estaba vacilando pero lo cierto es que la gente tardó pocos segundos en volver a disfrutar del concierto. Tras tocar muchos de sus clásicos y doblar el tiempo que tenía previsto actuar (para compensarnos por la ausencia de su compañero de cartel) salió a escena un tipo de la organización que nos comunicó a todos los presentes en la plaza de toros que habían llamado a Chuck Berry un par de horas antes del concierto y que éste había cogido un avión y se encontraba de nuevo en los Estados Unidos, en su casa. ¿Los motivos? No los dijo. ¿Cuál parece ser la realidad? Pues parece que este venerable anciano es muy aficionado a poner sus coches a mas de 200 km/h y tras una de sus carreras junto a su asustada hija de copiloto, esta le recriminó tal actitud enzarzándose los dos en una discusión que propició que (por esta anécdota que no tiene nada que ver con la música) mandara a la basura la gira que estaba realizando para largarse a su rancho, evidentemente después de haber cobrado el 100% del dinero por adelantado.


Ahora me diran ustedes... ¿donde termina el músico y comienza el egomaníaco? ¿En algún lugar de tantos kilómetros de carretera a lo largo de toda su vida o en algún lugar de alguna cifra estratosférica de su cuenta corriente?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente post!!!!!

Babilonia Wild-Rock dijo...

Habia oido lo ocurrido al poco de pasar, pero ya que lo comentas ahora....la verdad es que hay musicos que tienen my poco respeto por el respetable, que es quien los pone y mantiene donde estan. De vergüenza.

Lorbada dijo...

Parece que la edad y experiencia no le han impregnado un pokito de educación y respeto por su público.

Mr. Brown Blind Leppard dijo...

La culpa es en parte de los que le pagaron por adelantado. Al promotor del Seie z le pasó lo mismo con Rock City Angels...

Lorbada dijo...

Yo trabajé durante un año en una promotora de conciertos y te aseguro que el 99'9% de los artistas exigen el pago por adelantado 24 ó 48 horas antes. Si no, no se suben al escenario. Por ese motivo montar un concierto no es tan fácil, puedes ganar un dinero importante pero tb te puedes arruinar de un día para otro.