VARGAS BLUES BAND - Flamenco Blues Experience (2008)

Javier Vargas es un guitarrista que siempre que lo he visto tocar me ha fascinado pero cuyos discos no me habían conseguido calar todavía. Siempre he pensado que estos pecaban de excesiva producción y cuya estética primaba antes que la música en sí. Aunque siempre he sabido que llegaría el día en que sacaría el álbum definitivo con el que poder decir bien alto ¡¡menudo discazo se ha sacado el Vargas!! Y eso es exáctamente lo que ha sucedido con Flamenco Blues Experience, un discazo lo mire por donde lo mire.

Un trabajo de fusión blues, rock y de sonidos latinos, donde han participado 27 músicos sin contar al propio Javier y grabado en los Ardent Studios (Memphis, USA) con el ingeniero John Hampton (The White Stripes, The Reacounters...). Quizás el mayor acierto ha sido saber acompañarse genialmente por gente del calibre de Raimundo Amador, Devon Allman (hijo de Greg Allman), el guitarrista canadiense Frank Marino (con cierta polémica puesto que no quedó demasiado contento con la mezcla final ni con el trato dispensado por el entorno de Vargas), Paqui Durán y Manuel Morao (del dúo Rey Morao) o los bilbainos The Cherry Boppers. Estos le dan al disco ese aire a lo Supernatural de Santana, porque no nos engañemos, aunque parece claro y evidente que el disco trata de ser un Are You Experienced? de Hendrix a lo latino, no lo consigue nada más que en dos o tres temas dejando el resto para guiños al ya mencionado Santana en un 50%, y alguno que otro también a gente como Eric Clapton, John Lee Hooker o Steve Ray Vaughan, solo consiguiendo acercarse a menudo al mejicano y ofreciéndonos únicamente alguna pincelada suelta del resto.

El caso es que de una forma u otra el resultado final me ha dejado noqueado puesto que no esperaba a estas alturas un disco tan fresco y rico en sonidos amplios de miras y matices como este Flamenco Blues Experience que abre con su particular Purple Haze, un tema titulado Walking The Streets que sí hace justicia a las intenciones de tributo a Jimi Hendrix al igual que el siguiente, aunque este también trae ecos de Hooker e incluso de Jeff Beck, siendo aquí donde Frank Marino da toda una lección a todos los amantes de las seis cuerdas. Ya Ya Ya, Looking For My Baby es una impresionante canción que quizás sirva como puente entre ese sonido más Hendrixiano (por llamarlo de alguna forma) y el núcleo central del álbum más Santaniano (por llamarlo de otra forma) con un Hammond dándonos la bienvenida junto a la efusiva guitarra de Vargas y un pegadizo estribillo.

Beautiful Woman ya es otro cantar, aquí empieza el grueso gordo de canciones con aires de blues con sonidos latinos, primordiando en esta ocasión el sonido flamenco con el cante de Paqui Durán que lo envuelve todo. Lo siguiente es Blues Para Lucía, primera incursión en el álbum del extraordinario Raimundo Amador quien se bate con su guitarra con Javier Vargas al igual que en el siguiente tema, No Pasa Nada, donde vuelve a repetir el sevillano tratándose en esta ocasión del descafeinado single que no hace justicia al disco, salvando los muebles de la canción el ex-Pata Negra. Adoro a Raimundo, creo que jamás nadie le ha sacado un blues a una guitarra flamenca como lo hace habitualmente este tio, que además es más buena gente y generoso con todo el que se le acerca y con los músicos con los que siempre está gustoso de colaborar. Un puto crack. En cuanto al single... pues eso, muy Supernatural de nuevo, con una producción con unos ecos muy ochenteros en la voz y en alguna guitarra que no me acaban de convencer, aunque el resultado final quede curioso para las FM's pero para mi gusto algo forzado.

En Tierra Del Vino sigue dándole bola al mismo sonido aunque está vez más mimado, canción instrumental también con una guitarra flamenca de fondo y con esa especie de textura ambiental qué me trae (no tengo claro si acertádamente) a John Lee Hooker y su Chill Out a la cabeza, con un bajo que es de lo mejorcito y un sonido mucho más logrado y satisfactorio que en el anterior intento. Blue Vision me suena más al notable From The Craddle de Clapton que a otra cosa y en Blues De Lo Colores vuelve a sacar el Hammond para dejarnos otro sobresaliente tema instrumental donde la guitarra va marcando la pauta en todo momento. En las dos últimas piezas vuelve a la senda de Hendrix dejándonos dos de los mejores momentos del disco para el final, con una superlativa Mojo Hand donde la guitarra aulla como si estuviera en celo y clausurando este fabuloso disco con Your Love Is A Jail (vaya solo final), una de las mejores demostraciones de que estamos ante un gran guitarrista, injustamente ninguneado por parte de la prensa especializada e ignorado por un amplio espectro de público que jamás ha escuchado nada más de el hispano-argentino que no sea el ya trilladísimo Sangre Española, junto a Manolo Tena.

Pues aquí teneis la oportunidad de poder disfrutar y rendiros ante uno de los mejores guitarristas de este país que por fin en estudio ha conseguido crear su gran obra, equilibrada e inspiradísima, esa que todos los músicos necesitan para pegar el salto cualitativo en cuanto a reconocimiento y perdurabilidad en la historia. Ya desde la portada realizada por Bob Masse, diseñador de posters de rock para actos en el Fillmore West de San Francisco (Cream, Grateful Dead, Jimi Hendrix, Bob Dylan, U2…), nos transporta a una maravillosa experiencia de flamenco, blues y sonidos latinos jazzísticos para nuestros oidos. La Vargas Blues Band nos brinda uno de los mejores trabajos de un español en 2008 y una deliciosa delicatessen para todos aquellos a quienes no les dé miedo la fusión y les apasione el blues más guitarrero.