martes, 3 de mayo de 2011

THE KILLS - Blood Pressures (2011)


Para muchos como yo que nos hemos acercado a The Kills gracias a las recientes colaboraciones de Alison Mosshart con Jack White en The Dead Weather quizás tengamos la ventaja del factor sorpresa. Quizás muchas veces cuando los medios británicos alaban sobremanera a un grupo a veces a uno le da miedo de que sea el enésimo gato por liebre de la prensa del Reino Unido, que nos intenta vender la moto de una nueva banda que va a marearnos o la nueva oleada de grandes talentos. Luego está la prensa rosa... que si Jamie Hince es el flamante marido de la chupacabras de Kate Moss y la cosa ya huele peor.


Pero de repente Alison desata la atención del actual Rey Midas del Rock, Jack White, que la llama a filas junto a otros talentos igual de sobresalientes y la chica consigue robarle protagonismo a todos y convertirse en la imágen y la lasciva voz de la banda. El experimento sorprende y aunque la tía no es un huracán sexual físicamente, resulta incluso que tiene una imágen de caótica, yonki, autodestructiva con flequillo despeinado y mirada traviesa que, mira tú por donde, a mi como que me excita un montón. Tiene magnetismo, eso de lo que muchos presumen y que casi nadie llega a tocar no más que con la punta de los dedos.


The Dead Weather sacan dos discos cojonudos en solo dos años y anuncian que el clima muerto se aparca durante un tiempo para volver a sus proyectos de siempre. Bueno, Jack White con su sello discográfico, sus labores de producción a Wanda Jackson, Jerry Lee Lewis y Seasick Steve y un posible disco en solitario, además de finiquitar a los White Stripes, comprar una flota de furgonetas que convierte en tiendas de discos ambulantes (algo así como unos sound systems pero a su rollo), inventar un nuevo tipo de vinilo y quien sabe si la cura de la malaria algún día. Alison retoma The Kills y hace un mes sacan nuevo disco, Blood Pressures.


Y uno va con la sana intención de pasar un buen rato y se da cuenta de que el disco le parece irresistible. El 90% de las canciones darían para una batalla épica entre compositores con ideas agotadas que matarían por ese puñado de joyitas. Algunas más accesibles a la primera, otras sobre las que hay que arañar un poco con cada escucha para encontrar el tesoro que yace en su interior. Jamie "Hotel" Hince es un guitarrista rítmico sorprendente y sus guitarrazos suenan de fábula. Oscuros, delicados o rompedores, un hombre que no me cabe duda que es el auténtico cerebro en lo referente a la música en The Kills. Pero es que aquí uno es un romántico incapaz de pasar por alto esa voz que te deprime o te pellizca el interior, o te anima a bailar agresivamente. Alison es mucho Alison. Será porque vivimos tiempos en los que necesitamos renovar el panorama femenino de cantantes, bastante agotado y que parece que en los últimos años empieza a dar tímidas muestras de renovación, pero insuficientes.


Y lo típico sería elegir unas cuantas canciones como Nail In My Coffin, Satellite, Baby Says, Wild Charms (cojonudo Hince al micro, bellísima canción), The Last Goodbye (emocionante Alison con piano) o Future Starts Slow que abre con maestría el disco. Pero probablemente un par de días después eligiera otras y así unas cuantas veces. Es el típico álbum en el que pocas piezas no encajan. Un sonido que bebe del rock industrial, el garage o el synth-pop y que se amolda a las exigencias melódicas de la pareja como un guante. Una sorpresa. Y todo esto, para alguien que no hace mucho que ha descubierto a The Kills, lo convierte en síntoma de que va a pasar muchas horas disfrutando de buena música.



7 comentarios:

Redacció dijo...

Los ví en directo hace cinco años cuando sacaron su No Wow, también sonó bastante, me gustaron, sin decir nada nuevo suenan frescos a base de riffs y una buena interpretaciñon de Alison. A tener en cuenta, les había perdido la pista. Saludos

Unknown dijo...

Pues está muy guapo el grupo.

Jack White mola mucho.

Una pena que no estén ya los White Stripes, en fin.

Saludos tío!! Hacía tiempo que no te veía por aquí!!

Sergio DS dijo...

Desde luego es disfrutar de buena múscica,... cojonudo, cojonudísimo!

Lorbada dijo...

Txals: te envidio tio. Tengo ganas de catarlos en directo. Tb he escuchado el No Wow y es mucho más crudo y duro. Cada uno tiene su punto.

Alex Noiser: tranquilo por White, pronto tendrás noticias suyas y más discos enormes. Por ahora nunca ha fallado.

Sergio: tú lo has dicho ;)

Juanjo Mestre dijo...

No recuerdo quién me los recomendó en la blogo. Me lo agencié este disco y me pareció estupendo. Ganas me entran de darle más cancha luego cuando salga en la bici. Saludos.

KARLAM dijo...

Me los descubrió un amigo hace unos meses con su anterior disco, y a este ya le pegué varias escuchas. Aprovecho esta entrada para ponérmelo otra vez, y de paso ya te digo que a mi esta tia también me pone un montón.

pd: Ya me puse en serio con Black Joe Lewis & The Honeybears, ¡buenísimos!

Un saludo.

madreloba dijo...

También yo los descubrí con el No Wow, que me gusta un güevo. Son un grupo muy interesante y con una imagen "peligrosa" que me encanta. Salud.