RICH ROBINSON - Through A Crooked Sun (2011)

Aunque no tengamos ni idea de cuando volverán los Black Crowes nos podemos dar con un canto en los dientes con la honestidad y la garantía que significa el llevar en un disco el sello Robinson. No nos vamos a encontrar experimentos extraños ni florituras como con otros músicos cuando abandonan su banda de origen. No quieren demostrar nada a nadie. Ya lo vimos en la anterior separación y es lo que se vislumbra en el presente y en el futuro a corto y medio plazo. Por supuesto espero que no haya un medio plazo, claro, y que pronto vuelvan a la carretera bajo el plumaje de los cuervos negros.

Dentro incluso de la carrera en solitario, aún esperando que Chris Robinson saque disco no muy tarde, su hermano nos ha aportado dos discos bien diferenciados. El primero con más presencia de riffs y ruidoso, seguramente deudor de el final de la anterior etapa de la banda. Lions y la gira con Jimmy Page que culminó con Live At The Greek plasmaron su inercia en Paper y su autor tampoco intentó disimularla. Ahora en Through A Crooked Sun se le han pegado algunas maneras de los últimos trabajos de los Black Crowes. Una música más suave, muy enraizada en el folk y el country, con muchos medios tiempos y más densa, en alguna ocasión. Incluso consigue sustraer alguna muestra de tejido, reutilizable aquí, de ese maravilloso Amorica.

Pero el gran problema aquí es que me imagino muchas de estas canciones con la voz de su hermano Rich y de repente es como si se quitaran una correa. Los temas tienen un techo porque no tienen una gran voz. Les falta forzar la emoción vocal y para entendernos, echarle algo de tabasco también a algunas melodías. Sacar algún que otro estribillo coreable y no alargar canciones como Follow You Forever o I Don't Hear The Sound Of You, esta última con un pasaje instrumental, antes de concluir, con un "solo" de xilofón que me aburre una barbaridad.

Pero en términos generales el disco me ha gustado y me parece un digno sucesor de Paper. Incluso canciones como Station Man o File Around, inexplicablemente las dós últimas del disco como arrinconadas, tienen elementos de este. El resto están bien diferenciadas. Los temas son más complejos, tienen una instrumentación más heterogénea y le da mucho más protagonismo a voces, teclados, percusión... Ha intentado superarse y se ha quedado al mismo nivel, pero con un trabajo bastante diferente al primero aunque igual de valioso.

Lo que aquí tenemos es el 50% de una banda tan grande que poco de lo que hagan en solitario podrá saciarnos. Uno espera una chispa mágica que haga saltar una explosión de inspiración que desemboque en un disco magistral porque hablamos de gente que es capaz de ello. El problema es que aún no lo han demostrado y se han quedado sin ese reconocimiento que a todo músico le encanta. Que una obra suya independiente se empiece a comparar en calidad con las de su grupo de toda la vida. Y por el momento nada de nada.

Through A Crooked Sun se queda a medio camino pero se merece unas cuántas escuchas. Aún tendremos que esperar varios años más a que las aguas vuelvan a su cauce en los Black Crowes, de hecho hace nada que lo dejaron. Sin embargo es el momento de no preocuparse por eso y sí de disfrutar de un buen trabajo que tiene muchos de los ingredientes de esa receta tan mágica que solo son capaces de cocinar Chris y Rich cuando trabajan codo con codo en la misma cocina.